28-10-2024 / Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) ha retirado el último tren de la serie 4000 que quedaba en circulación en la línea 1 del metro de Barcelona. Era el último convoy con algún elemento que contiene amianto que todavía estaba en servicio en la red.
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La presencia de este material no estaba a la vista ni representaba peligro alguno para las personas usuarias. El último convoy de esta serie efectuó su última recorrido el pasado sábado entre las estaciones de Hospital de Bellvitge y Fondo, después de más 100 millones de kilómetros (entre toda la flota de la serie).
Ahora, la Fundación TMB sumará una pieza más a su amplio abanico de vehículos históricos, preservando tres coches de esta serie 4000: dos motores y un remolque.
La presidenta de TMB, Laia Bonet, dijo que «se ha logrado uno de los objetivos más importantes de TMB: se han sustituido todos los vehículos que tenían algún elemento con amianto, por lo que ya no circularán más trenes con este material por la red de metro de Barcelona». Bonet explicó que la llegada de las series 7000 y 8000 «han permitido sustituir 50 trenes por unos más modernos, cómodos y accesibles y seguir dando un servicio eficiente a la ciudadanía».
El 7 de julio de 2023 se puso en servicio el primero de los nuevos trenes de la serie 8000 que progresivamente han ido entrando en la L1 para sustituir a los vehículos de la serie 4000. Los nuevos trenes, más sostenibles y más accesibles, forman parte de la mayor compra de material ferroviario de la historia de TMB, que ha supuesto una inversión de 318,85 millones de euros. Se han comprado un total de 50 trenes, sumando los 26 de la serie 7000 por la L3 y los 24 de la serie 8000 para la L1, que representan un 27% del total de la flota.
La inversión de estos nuevos trenes se ha realizado a través del contrato-programa de TMB con el consorcio de la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) y ha contado con la financiación del Banco Europeo de Inversiones (BEI). Seis de los trenes también recibieron ayudas del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea, a través de la Generalitat de Catalunya.
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Los trenes de la serie 4000, diseñados junto con los de la serie 3000, entraron en servicio en la L1 (de ancho ibérico antiguo de 1.674mm) entre 1987 y 1990 para sustituir de forma progresiva en los trenes de la serie 400.
Las diferencias con los trenes de la serie 3000 eran el ancho de vía, la tensión de 1.500 V y su gálibo que era más ancho y aumentaba la capacidad total del vehículo. La primera circulación oficial con pasajeros fue el 21 de abril de 1987, en un trayecto entre La Sagrera y Universidad.
Entraron en funcionamiento 17 unidades y, el 15 de febrero de 1990, se incorporaron las 7 restantes. Esta serie, con 24 trenes de más de 37 años de antigüedad, fue reformada hacia la mitad de su vida útil para actualizar su tecnología, elevar su fiabilidad y mejorar su confort interior. Entre otras cosas, se abrió el pasillo de conexión entre coches.
Los trenes de la 4000 fueron construidos por una asociación de empresas integrada por La Maquinista Terrestre y Marítima (MTM), Material y Construcciones SA (Macosa), Construcciones y Auxiliar de Ferrocarroles SA (CAF) y Mitsubishi Elecric Netherlands.
Foto: TMB