17-1-2023 / La Guardia Urbana de Barcelona ha presentado hoy las diez nuevas furgonetas eléctricas que se destinarán a la Unidad de Investigación y Prevención de la Siniestralidad.
Los nuevos vehículos, las primeras furgonetas eléctricas de la unidad, son modelo Citroen E-Jumpy y disponen de una autonomía de 196 a 285 kilómetros. El Ayuntamiento las ha adquirido a través de un contrato de renting de cinco años por valor de poco más de un millón euros.
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Estas furgonetas, ya logotipadas con el patrón Battenberg de alta visibilidad, se suman a las cuatro híbridas que se adquirieron el pasado mes de abril finalizando de esta forma la renovación de las furgonetas de la UIPA incorporando un total de 14 vehículos.
La longitud de los nuevos vehículos es de 4,6 metros para favorecer la rápida intervención y los desplazamientos por la ciudad pero con la seguridad y posición elevada de una furgoneta, lo que facilita la accesibilidad y visibilidad de los conductores y de la ciudadanía.
Son más pequeñas que las cuatro furgonetas presentadas en el mes de abril y que hacen función de oficina de atestados incorporando novedades y mejoras tecnológicas como el Cras Data Retrieval (Recuperación de los datos del accidente), aparato que sirve para leer las datos del Event Data Recorder (EDR; Registrador de datos de sucesos).
El EDR es un módulo (memoria como un disco duro) integrado en los vehículos a raíz de la normativa europea 2019/2144, que obliga a incorporar determinados elementos de seguridad a todos los vehículos. Son conocidos como los sistemas ADAS (Advanced Driver Assistance Systems), sistemas de ayuda a la conducción para incrementar la seguridad vial. Desde el pasado mes de julio los vehículos fabricados deben incorporar este módulo que registra los últimos 5 segundos si el vehículo sufre un siniestro de tráfico.
El CDR es el aparato con el que la Guardia Urbana realiza la lectura de los parámetros registrados en el módulo del vehículo. Este módulo está conectado al exterior por un enchufe y se realiza la lectura con un ordenador que emite un informe con parámetros relacionados con la conducción.
El EDR puede registrar información, pero sólo a raíz de un evento físico como una colisión; información dinámica del vehículo y estado de los sistemas durante los 5 segundos anteriores a la colisión; algunas acciones del conductor en los 5 segundos previos a la colisión; información sobre la severidad de la colisión; información relativa al uso y activación de los sistemas de retención; información post-colisión como la activación de los sistemas automáticos de notificación de accidente.
Toda esta información analizada conjuntamente con las labores de inspección ocular del lugar de los hechos, resulta vital para incrementar la calidad de los informes y atestados de la Guardia Urbana de Barcelona.
La lectura de los módulos EDR se realiza cuando existen víctimas mortales, heridos graves o cuando se pueda derivar un delito contra la seguridad del tráfico.
La Guardia Urbana dispone actualmente de 584 vehículos motorizados de los que 249 son eléctricos o híbridos no enchufables, lo que supone el 42,64% del total de la flota del cuerpo (el 14,38% del total son eléctricas y el 28,25% híbridos).
Este año se incorporarán 36 nuevos vehículos totalmente eléctricos (turismos y scooters) y se prevé la progresiva sustitución de los quads térmicos por eléctricos.
El Ayuntamiento de Barcelona trabaja para avanzar hacia una movilidad más sostenible potenciando los desplazamientos a pie, en bici y en transporte público y fomentando al mismo tiempo el uso de vehículos híbridos y eléctricos, que suponen una oportunidad para reducir las emisiones de contaminantes locales, las emisiones de CO2, el ruido y el consumo energético.
Fotos: Ayuntamiento de Barcelona