14-2-2022 / La Unidad Antidesahucios del Ayuntamiento de Barcelona, creada en 2015 y que ha acompañado a más de 13.000 familias desde su creación, dará un paso adelante este 2022 como servicio específico que centralizará de manera integral la gestión de la atención social a las familias en procesos de pérdida de la vivienda.
Para ello, se triplicará al equipo, pasando de 16 a 43 profesionales, logrando una mayor capacidad de gestión que permitirá reforzar la mediación e intervención preventivas.
El objetivo principal, a través de la prevención y la mediación previa que ahora se reforzará, es evitar al máximo que se produzcan desahucios y que éstos se realicen el día señalado.
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Actualmente, gracias a la intervención de la Unidad Antidesahucios y los movimientos vecinales, el 90% de las órdenes de lanzamiento en la ciudad no se ejecutan, y el 80% se suspenden antes del día señalado.
La notable ampliación del equipo se concreta con el aumento de 13 a 30 profesionales del ámbito social y la mediación, 20 de las cuales estarán territorializados, pisando la calle y junto a las familias, y 10 en las oficinas centrales. Además, el servicio se refuerza con un nuevo equipo jurídico de cinco personas y completarán el equipo personal de administración y coordinación.
Mediación preventiva desde los primeros impagos
Esta ampliación persigue permitir a los profesionales del servicio disponer de más tiempo y recursos para acompañar los casos, conocerlos con más antelación y articular la mejor respuesta posible activando todos los recursos disponibles para evitar la pérdida de la vivienda. Asimismo, las familias tendrán un profesional de referencia único, que realizará una atención integral en todo lo referente al proceso de pérdida de la vivienda.
La estrategia del servicio seguirá siendo la mediación, con el acento puesto en la prevención y llegando a intervenir lo antes posible, para activar recursos como las ayudas al pago del alquiler o de compensación de la deuda generada, la entrada en programas sociales como la Bolsa de Alquiler municipal, y especialmente en lo que se refiere a los grandes tenedores, realizar los requerimientos oportunos para cumplir las obligaciones legales vigentes.
La activación preventiva de la mediación tiene un doble beneficio, evitar que las situaciones se agraven y se dificulte así la llegada a un acuerdo, y que la consecución de una solución evite el alargamiento del proceso y, por tanto, el sufrimiento de las familias.
Asimismo, la Unidad asumirá la interlocución única con los órganos judiciales, por la recepción de comunicaciones y el envío de documentación e informes vinculados con los procedimientos de pérdida de la vivienda. Esta interlocución única y especializada con los juzgados es clave para conocer los casos judicializados a la mayor brevedad posible y poder intervenir lo antes posible.
Más dinero: 700.000 a 2,5 millones de euros al año
El precio de la licitación para la renovada Unidad Antidesahucios asciende a 5.091.112 euros, un importe que asumirá en solitario el Ayuntamiento de Barcelona, por una duración de dos años con la posibilidad de dos prórrogas anuales, hasta un total de 4 años. La previsión es que el contrato se adjudique en el último trimestre de 2022. Cabe destacar, pues, que los recursos económicos que destinará el Ayuntamiento se multiplican de acuerdo con el redimensionamiento del servicio, pasando de los 700.000 euros anuales a los 2,5 millones.
Foto: Ayuntamiento de Barcelona