23-1-2022 / Mañana lunes comenzará una nueva fase de la transformación de la calle Gran de Sant Andreu con el inicio de la reurbanización de la vía entre la calle de Joan Torras y la plaza de Mossèn Clapés, en el distrito de Sant Andreu.
La actuación permitirá dar continuidad al tramo de calle renovado a finales de mandato pasado y completar la transformación prevista para aumentar el espacio peatonal y las zonas de estancia, favorecer el comercio de proximidad y pacificar la circulación de vehículos. Un paso más, pues, en el desarrollo del modelo Superilla Barcelona.
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En coherencia con la intervención ya hecha entre la rambla de Fabra i Puig/Onze de Setembre y la calle de Joan Torras, en este nuevo tramo se dotará a la calle de una plataforma única con preferencia para peatones y bicicletas. En cuanto al verde, se mantendrán los centenares de árboles que hay y se plantarán una veintena de nuevos y unos 500 m2 de arbustos.
También se actualizarán todos los elementos de la urbanización, como la pavimentación, servicios, telecomunicaciones y drenaje, y se pondrán una treintena de bancos y una veintena de sillas. El objetivo es que Gran de Sant Andreu se convierta en una vía cívica de gran calidad urbana.
Además, la propuesta incluye una pequeña parte de todas las calles transversales: Joan Torras, Agustí Milà, Guardiola y Feliu, Tramuntana, Campeny, Colombia, Valentí Iglesias y Balira. La superficie total del ámbito es de 9.100 m2, y se actuará sobre 460 metros de longitud de Gran de Sant Andreu, que con los 850 del primer tramo sumarán un total de 1,3 kilómetros de espacio público reurbanizado.
El proyecto tiene un presupuesto de 4,15 millones de euros, y la previsión es que las obras finalicen a principios de diciembre, para que la calle esté lista para la campaña de Navidad. Los trabajos se ejecutarán en dos fases: una primera entre Joan Torras y Campeny, que comienza mañana, y una segunda entre Campeny y la plaza del Mossèn Clapés, que se iniciará el próximo verano.
La urbanización de la calle Gran de Sant Andreu responde a una demanda vecinal histórica del barrio de Sant Andreu de Palomar. La intervención nació de un amplio proceso participativo previo a encargar el proyecto que permitió dar respuesta a las necesidades de rehabilitar la calle e impulsar la recuperación de espacio peatonal en el principal eje comercial del distrito de Sant Andreu. Por este motivo, tal y como se hizo en la urbanización del primer tramo, se hará seguimiento de la obra desde una comisión de seguimiento que contará con las entidades vecinales y de comerciantes de la zona.
Esta pacificación se suma a la reforma de la avenida Meridiana, a la transformación de los entornos de la Sagrera, a la nueva estación de Sant Andreu, al Puente de la calle de Santander o a la urbanización del Bon Pastor. Con todas estas actuaciones, el Gobierno municipal habrá invertido este mandato más de 35 millones de euros en transformaciones urbanas en el distrito de Sant Andreu.