17-11-2021 / La Comisión de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona ha dado luz verde a la reforma de la vía para hacerla más amable, destinar más espacio al peatón, la bicicleta, el verde y la movilidad sostenible.
Desde el Consistorio se considera que los cambios contribuirán a la reactivación del comercio local y del centro de la ciudad. Los votos a favor fueron del Gobierno municipal y ERC. En contra votaron los restantes partidos de la oposición.
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El objetivo, tras un proceso de consultas con los agentes implicados, es hacer de la Via Laietana un lugar donde sea cómodo pasear y comprar, que una mejor los barrios del Gòtic y de Sant Pere, Santa Caterina i la Ribera y con un espacio predominante para al peatón, el transporte público y la bicicleta.
Así, las aceras se amplían hasta los 4 metros a lo largo de toda la calle, desde la plaza de Urquinaona hasta la de Antonio López –que próximamente se separará y se convertirá en las plazas de Idrissa Diallo y de Correos –. Las anchuras actuales van de los 2,6 a los 3,5 metros, por lo que se favorecerá el paseo vertical, y también se potenciará la conectividad transversal.
Habrá una gran plaza en Antoni Maura que unirá la Catedral con el Mercado de Santa Caterina, y se generarán plazas nuevas en los cruces con los principales ejes de Ciutat Vella: en los cruces con la calle de Jonqueres, que hasta ahora tiene aceras de menos de 2 metros y pasará a ser de prioridad peatonal, y a los de las plazas de Àngel y de Antonio López. En estos espacios se reforzará el arbolado y se mejorará la pavimentación y la iluminación.
También se reubicarán y se ampliarán los pasos de peatones para mejorar la conectividad de los ejes transversales de Ciutat Vella. La actuación en la plaza de Antonio López, que también prevé la pacificación de las calles de la Fusteria, Àngel J. Baixeras y Consolat de Mar, incluirá un paso de peatones mucho más ancho que el actual para conectar las dos plazas a cada lado de la Via Laietana. Y se harán dos nuevos pasos de peatones: uno que enlazará la plaza de Correos con el Moll de la Fusta y otro directo a la calle Llauder, que conectará con la Barceloneta. En total, el conjunto de los pasos de peatones de la vía pasará de una anchura acumulada actual de 77 metros lineales a 126.
Sentido subida: solo vecinos y transporte púbico
En cuanto a la movilidad, en sentido subida habrá un carril para buses y taxis que también podrán utilizar los vecinos y vecinas de Via Laietana y Barceloneta para garantizar la buena conexión del barrio. De esta forma, no habrá tráfico privado general en dirección Urquinaona, y el recorrido alternativo será por Picasso y Lluís Companys, trayecto que según los estudios técnicos municipales sólo supondrá entre 1 y 3 minutos más.
Esta circunstancia ha sido clave para que los partidos de la oposición se opongan a la reforma, al considerar que el tráfico se colapsará en el recorrido alternativo.
En cuanto a la bicicleta, el carril bici de subida se ubica junto a la acera, en el lateral y segregado del tráfico. En sentido bajada habrá un carril compartido para buses y bicicletas y un carril de circulación limitado a 30 km/h. Estos cambios garantizarán que la Via Laietana sea una calle ciclable y segura.
Las paradas de autobús se colocarán en las plazas nuevas y se garantizarán espacios para autocares discrecionales. También se asegura una buena solución para los puestos de taxis, que se duplicarán –se pasará de 4 a 8 plazas–, y para la carga y descarga –se crecerá de 25 a 54 plazas–. Y se garantizará el acceso al Mercado de Santa Caterina y los hoteles.
Presupuesto y calendario
Inicialmente se han aprobado dos documentos: el anteproyecto de reforma de toda la Via Laietana, que tendrá un presupuesto total de 32,9 millones de euros, y el proyecto ejecutivo del primer tramo que se realizará.
Según el calendario previsto, en marzo del próximo año empezará la renovación de las redes de servicios para poder iniciar en junio la reforma del tramo entre las plazas de Urquinaona y de Antoni Maura, que durará 11 meses y se destinará 16,8 millones de euros.
Desde que se inicien los trabajos en las redes de servicios, se mantendrán dos carriles de bajada en toda la vía -uno de bus y uno de vehículos-, y de subida los buses se desviarán hacia el paseo de Picasso y los vehículos podrán llegar hasta la altura de la plaza de Antoni Maura.
Finalizado el primer tramo, se ejecutará el de Antoni Maura hasta Idrissa Diallo, que contará con un presupuesto de 16,1 millones de euros.
El Ayuntamiento tiene previsto desplegar un importante dispositivo de comunicación para informar y hacer seguimiento de la evolución de las obras. Se tratará de mantener al día al vecindario y comerciantes para minimizar las afectaciones de los trabajos y reducir las posibles alteraciones en la actividad habitual de la Via Laietana.