8-5-2021 / Con la finalización del toque de queda a las 0 horas del domingo se prevé un mayor uso del espacio público en horario nocturno, de ahí que la Guardia Urbana aumentará en un 30% el número de efectivos en un dispositivo nocturnola próxima noche.
Loa agentes barceloneses trabajarán en coordinación con el cuerpo de los Mossos d’Esquadra, tiene el objetivo de velar por el buen uso del espacio público y garantizar el civismo y seguridad dentro de los parámetros preventivos marcados por las autoridades sanitarias.
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En este sentido se tondrá especial atención en aquellas conductas que pueden facilitar la transmisión de la Covid-19 como pueden ser no respetar la limitación de grupos de 6 personas, no llevar mascarilla o el consumo de alcohol compartido.
Los agentes trabajarán para evitar la venta ambulante de alcohol en la vía pública y realizarán tarea de prevención, control y corrección de las concentraciones de personas que consumen alcohol de forma colectiva ( «botellón») en la vía pública.
La Guardia Urbana también controlará comportamientos que generen molestias a terceras personas y velará por el descanso de los vecinos.
Se dará respuesta a los problemas derivados de las fiestas no autorizadas, tanto en la vía pública como en el interior de locales, que ocasionan graves molestias a los vecinos y una reducción evidente del grado de seguridad en la zona afectada manteniendo el dispositivo específico para el control de esta actividad que, entre otras medidas, incluye la monitorización de las redes sociales para detectar posibles convocatorias,
Los agentes también realizarán funciones de prevención de la seguridad ciudadana y actuaciones destinadas a evitar la comisión de actos delictivos. También se encargarán de las funciones de proximidad, auxilio y asistencia a los ciudadanos, y la vigilancia general de los espacios públicos.
La Guardia Urbana también tiene el objetivo de reducir la siniestralidad, de ahí que se aumentarán en horario nocturno el número de controles de alcoholemia y test de drogas. También se hará una atención de la siniestralidad en los vehículos de dos ruedas y los vehículos de movilidad personal.
20.237 denuncias por saltarse el toque de queda
Desde el inicio del toque de queda el pasado 25 de octubre, y hasta el 30 de abril, la Guardia Urbana ha interpuesto un total de 37.034 denuncias, de las que 20.237 han sido para saltarse el toque de queda; 12.605 por no hacer uso de la mascarilla; 4.865 por incumplir limitación de personas; y 4.199 por consumo de alcohol compartido. Los agentes también han desalojado un total de 105.476 personas.