7-5-2021 / El Ayuntamiento de Barcelona activa el control de aforo de las playas, como medida preventiva de la Covid-19. El protocolo sirve para conocer el grado de ocupación de las playas y regular los accesos con el dispositivo de informadores a pie de playa en los accesos.
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A partir de esta semana, el servicio de información y sensibilización de las playas está integrado por un equipo de 8 informadores, 24 controladores de accesos y 2 coordinadores repartidos en dos turnos, que trabajan de lunes a domingo en temporada media de las 10 de la mañana a las 19 horas.
En temporada alta, a partir de finales de mayo, el dispositivo se ampliará con un total de 22 informadores, 24 controladores de accesos y 2 coordinadores repartidos en dos turnos, lunes a domingo de las 10 de la mañana a las 20 horas.
Las tareas de este servicio se centran en la sensibilización ambiental y seguimiento y control del aforo de las playas, además de las tareas de apoyo operativo a la dirección de playas.
Los informadores realizarán a diario rondas para transmitir mensajes de información, sensibilización y concienciación ambiental a la ciudadanía, incluyendo información y recomendaciones de prevención de la Covid-19 y atendiendo a los puntos informativos instalados en los accesos de las playas.
Los informadores harán el recuento periódico de usuarios de las playas, regulación de accesos, de aforo y de los usos deportivos. También darán indicaciones de redistribución de usuarios en las playas en caso de que de ocupación alta o muy alta.
El protocolo de aforo de playas
El protocolo de aforo de playas permite gestionar la afluencia de personas a partir del seguimiento del nivel de ocupación de cada una de las playas, para garantizar que se cumplen las recomendaciones básicas en el distanciamiento entre usuarios. El sistema de indicadores establece diferentes fases:
Indicador verde: ocupación baja de menos del 40%.
Indicador amarillo: empleo normal, entre un 40 y un 60%.
Indicador naranja: ocupación alta, de entre el 60 y el 80%, recomendación de ir a otras playas con menor afluencia de personas.
Indicador rojo: empleo muy alta de más del 80%.
El protocolo prevé, en caso de una ocupación muy alta que no permita garantizar las distancias, hacer el cierre de los accesos el menor tiempo posible para proceder a la redistribución de usuarios. En caso necesario, se solicitará el apoyo de la Guardia Urbana.
La capacidad de las playas se calcula en unas 25.500 personas para que los usuarios puedan mantener la distancia recomendada de un metro y medio. La temporada 2020, de junio a septiembre, se cerraron 38 veces alguna de las playas de la ciudad.
Actuaciones previas al inicio de la temporada alta
Del 10 al 17 de mayo está previsto realizar actuaciones de estabilización y perfilado en las playas de Barcelona, tareas previas al inicio de la temporada alta, que se iniciará el 29 de mayo. Las actuaciones consistirán en el perfilado de las playas y el trasvase de arena de zonas donde se acumula hacia zonas deficitarias en sedimentos.
Estos trabajos permiten dar a las playas un perfil adecuado para instalar todas las infraestructuras de temporada y dar protección a todos estos servicios que hayan podido quedar al descubierto como consecuencia de la erosión y la regresión de la línea de costa que sufren las playas de la ciudades.
Concretamente se harán movimientos de arena de la playa de San Miguel y Barceloneta, esperando a hacer el trasvase de arena de la bocana del Puerto Olímpico, hasta la playa de la Barceloneta y Somorrostro.