28-11-2020 / Agentes de comisaría de Sants-Montjuïc de Mossos d’Esquadra han desmantelado un punto de venta de cocaína ubicado en un piso y una plantación interior de marihuana, con 271 plantas, situada en otro piso del mismo edificio.
El operativo, que tuvo lugar el 23 de noviembre por la mañana, contó con la participación de agentes de varias unidades del cuerpo de Mossos -GEI, Unidad Canina, Unidad de Subsuelo y ARRO-, con el objetivo de neutralizar las medidas de seguridad habilitadas en el piso.
La investigación se inició a finales de julio de 2020 ante las sospechas de que existían posibles puntos de venta de sustancias estupefacientes en la zona. Fruto de las tareas policiales, se pudo detectar el piso desde donde se vendía la droga. Concretamente, no se trataba de ningún domicilio ya que no residía nadie, sino que funcionaba exclusivamente como punto de venta ya que en su interior había sólo una persona encargada de vender la droga, cualquier día de la semana y a cualquier hora, circunstancia que provocaba inseguridad y molestias a los vecinos por el continuo movimiento de personas en la comunidad.
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Diseñado como un búnker
El piso estaba diseñado como un auténtico búnker, construido de hierro macizo blindado con el objetivo de evitar cualquier intrusión y dificultar cualquier acción policial. La entrada principal era una triple puerta de hierro reforzada y anclada por los laterales en las paredes. En la puerta exterior habían instalado una mirilla que les servía para dar la droga y recoger el dinero de los compradores, sin necesidad de abrir las puertas.
Las ventanas y balcones contaban con un doble sistema de rejas de hierro fijas y reforzadas con una construcción de hierros cruzados a modo de jaula. Las puertas interiores también eran de hierro y se encontraban ancladas en las paredes con pasadores de gran tamaño.
Con el fin de escapar de la acción policial, los vendedores, además de reforzar el piso como un búnker, habían diseñado un plan para deshacerse de las pruebas (sustancias, dinero y otros utensilios) consistente en un sistema de evacuación a través de las tuberías. Para asegurarse de la evacuación en caso de un corte de suministro de agua, contaban con un depósito de 25 litros.
En la entrada y registro se intervinieron 205 envoltorios con cocaína escondidos en el sifón de una tubería de la cocina, con un valor de 6.900 euros en el mercado ilícito.
En el operativo también se detectó la manipulación de los contadores de luz, lo que hizo sospechar a los agentes que podría haber también una plantación de marihuana. Después de hacer comprobaciones, se localizó en un piso del mismo edificio una plantación interior con 271 plantas de marihuana. En el momento de la entrada se detuvo la única persona que había dentro del inmueble.
El detenido pasó a disposición judicial el jueves pasado y el juez ordenó su ingreso en prisión.