12-11-2020 / El Gobierno municipal liderado por Ada Colau presentó ayer un ambicioso plan para transformar la movilidad en el Eixample de forma que el coche y las motos pierdan presencia y la ganen las zonas peatonales y ajardinadas, para el disfrute de viandantes y usuarios de la bicicleta. Se trata de extender a buena parte de Barcelona el programa de las supermanzanas.
La nueva etapa permitirá extender la transformación de los alrededores del mercado de Sant Antoni a todo el Eixample, ámbito prioritario de actuación ya que tiene un impacto potencial muy alto hacia el resto de ciudad debido a una densidad de población y niveles de tráfico y contaminación elevados y a la necesidad de crear más espacios verdes y confortables.
El equipo de gobierno proyecta en los próximos años extender de manera gradual y participada el modelo de supermanzanas en este ámbito con la creación de una red de 21 ejes verdes y 21 plazas de barrio, que permitirán ganar 33,4 Hectáreas de espacio para peatones y 6,6 de verde urbano.
El objetivo es que en el Eixample uno de cada tres calles sea eje verde y que los vecinos y vecinas tengan a un máximo de 200 metros un eje o una plaza de tamaño similar a una de las plazas de Gràcia.
El primer paso es el lanzamiento de dos concursos públicos para convertir cuatro calles en ejes verdes -Consell de Cent, Girona, Rocafort y Comte Borrell- y cuatro cruces en plazas durante este mandato.
Los ganadores del concurso de ejes verdes recibirán el encargo de definir el modelo de calle del siglo XXI, que se implantará progresivamente en el resto de la ciudad y priorizará el peatón, el esparcimiento, la estancia, el verde y la biodiversidad.
La previsión es que los proyectos se redacten a partir de mayo y las obras se inicien el primer trimestre de 2022, con una inversión de 37,8 millones de euros este mandato.