28-10-2020 / El Ayuntamiento de Barcelona ha firmado los primeros contratos a través de empresarios del sector turístico ponen a disposición un total de 22 apartamentos turísticos para que tengan un uso social durante los próximos años. En concreto se han firmado contratos con 5 propietarios, dos de los cuales han cedido dos edificios enteros que suman 16 de los pisos.
También estamos en Telegram. Para recibir en tu móvil nuestras noticias, clica aquí y síguenos: t.me/barcelonadia
Uno de los edificios, con 10 pisos cedidos, se encuentra situado en el barrio del Camp de l’Arpa del Clot (en el distrito de Sant Martí). El otro edificio, con 6 viviendas cedidas, está en el barrio del Poble Sec (en el distrito de Sants-Montjuïc).
El resto de los apartamentos turísticos cedidos se encuentran en 6 bloques de pisos diferentes, en propiedades horizontales de los barrios del Clot, la Vila de Gràcia, la Salut, la Sagrada Familia (Eixample) y Hostafrancs (Sants-Montjuïc).
La mayoría de las viviendas cedidas tienen dos habitaciones (un total de 13 viviendas). También hay de 3 habitaciones o más (5 viviendas) y de un dormitorio (4 viviendas). En total, estas viviendas podrán alojar 80 personas. El Ayuntamiento está trabajando para firmar nuevos contratos con otros operadores de viviendas turísticas que también se han mostrado interesados en el programa.
Con esta primera cesión de viviendas turísticas se materializa el programa diseñado por el Ayuntamiento de Barcelona para dar un uso temporal en alojamientos que tienen una licencia turística pero que por el impacto de la pandemia provocada por el coronavirus han quedado sin actividad y están vacíos desde hace meses.
Por un lado, el programa da una salida económica a viviendas que en estos momentos se encuentran amueblados y vacíos, y sin previsión de volver a tener un uso turístico en el futuro más inmediato. Por otra parte, el Ayuntamiento puede dar así una salida inmediata y más adecuada a familias y personas que están siendo atendidas por los servicios sociales de la ciudad porque se encuentran en una situación de precariedad económica y en un momento de impasse por haber sufrido la pérdida de su vivienda.
Las viviendas incorporados al programa serán adjudicados a familias que actualmente viven en alojamientos temporales a la espera de la adjudicación de una vivienda definitiva del parque público.
Los propietarios de las viviendas turísticas por su parte, han firmado un contrato de alquiler con el Ayuntamiento, por el que percibirán del Ayuntamiento rentas de entre 700 y 1.200 euros mensuales en función de sus características y del tiempo que lo tengan a disposición de los servicios municipales. Este alquiler es temporal, está previsto que tenga una duración de entre 12 meses y 3 años.
El Ayuntamiento se hará cargo también del acompañamiento de las familias a través de una entidad del tercer sector, que será a la vez la encargada de hacer un seguimiento y la atención continuada de estas familias y de sus necesidades a lo largo de la duración del contrato de alquiler. Se está trabajando para que sea la Fundación Hàbitat3, con la que el Ayuntamiento ya trabaja en otros programas de cesión de viviendas, la entidad que haga esta gestión.