24-7-2020 / El Plenario del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado hoy una modificación presupuestaria que permitirá disponer este año de un Fondo Covid de hasta 90 millones de euros, para afrontar la emergencia sanitaria, social y económica. Este fondo se ha aprobado con los votos del Gobierno municipal, PP y Barcelona pel Canvi y las abstenciones de ERC, JxCat y Cs.
El Fondo Covid está distribuido de la siguiente manera: 35 millones para hacer frente a las necesidades sociales; 30 millones destinados a la reactivación económica; 15 millones para las medidas de transformación del espacio urbano; y 10 millones dirigidos a las necesidades del ámbito cultural. Este dinero estaba previsto gastarlo en inversiones, que no se podrán acometer en el actual contexto de crisis.
En el debate del pleno, el primer teniente de alcaldía, Jaume Collboni, ha señalado que estas medidas son una «reacción rápida y precisa» que ha dado el Ayuntamiento a la situación generada por la crisis sanitaria. «Es un esfuerzo que tenemos que hacer juntos, es lo que espera la gente de nosotros y en esta ocasión lo estamos haciendo a la altura de lo que se nos está exigiendo», subrayó.
A su vez, el concejal de Presidencia, Presupuesto y Plan de Barrios, Jordi Martí, ha afirmado que se trata de «la mejor respuesta y la más expansiva» que se puede hacer en términos de presupuesto, y añadió que es posible gracias a que el Ayuntamiento es «una administración saneada que tiene remanentes y ahorros acumulados».
Uso del superávit
Previamente, se ha celebrado un pleno extraordinario impulsado por los grupos municipales de la oposición, donde se ha aprobado una resolución para exigir, de manera unánime por parte de todos los partidos, que el gobierno del Estado permita a los ayuntamientos el uso de la totalidad de su superávit del 2019 y sus remanentes de tesorería.
El pleno también ha pedido, una vez más, la derogación urgente de los artículos que afectan la autonomía local de la Ley de Estabilidad Presupuestaria (LRSAL). La resolución acordada también pide que el Gobierno municipal informe del marco financiero resultante para el presupuesto del 2020 y los siguientes.
Jaume Collboni ha manifestado que el problema de fondo son las leyes que aprobó en su día el PP con el apoyo, entonces, de CiU. «Los ayuntamientos, porque tenemos estas leyes aprobadas por la derecha, no podemos hacer las políticas que necesitamos», ha recordado. Collboni ha lamentado que la proposición no diga nada de la Generalitat, y ha recordado la deuda reconocida del Gobierno catalán con la ciudad de Barcelona, cifrado en 28 millones de euros, además del acumulado que registra con temas como la financiación de las guarderías o las inversiones que no se han hecho.