15-5-2020 / Un total de 2.827 parejas de gaviota corsa han anidado en Cataluña en 2020, según datos del último censo elaborado por la Red de Rescate de Fauna Marina, y personal técnico del Departamento de Territorio y Sostenibilidad, con el apoyo de los puertos de Barcelona y Tarragona.
La población de gaviota corsa en las comarcas de Barcelona se ha distribuido históricamente entre el Delta del Llobregat y el Puerto de Barcelona, con una relación directa entre los dos lugares. Inicialmente anidó el Delta del Llobregat y, a partir de 2013, mostró altibajos hasta que en 2016 se estableció en el Puerto de Barcelona.
A pesar de los últimos esfuerzos del Consorcio del Delta del Llobregat para recuperar la nidificación de gaviota corsa en este lugar, en 2020 tampoco se ha conseguido la recolonización de la zona. El mismo temporal de antes de Sant Jordi y los efectos previos del temporal Gloria no han contribuido. En 2019 ya hubo un intento de recolonización, cuando 67 parejas anidaron, pero ninguno salió adelante por el abandono de la colonia. Este año se ha registrado algún indicio en abril, que finalmente no ha fructificado.
En cuanto al Puerto de Barcelona, las cifras de nidificación de este año llegan a las 311 parejas, un 10% menos que en 2019 (344). En 2017 esta cifra subió hasta 537, coincidiendo con el abandono del Delta del Llobregat, y 582 parejas en 2018.
El puerto también quedó afectado por el temporal Gloria y la zona de la colonia, en el dique Este, debía ser arreglada y reparada justo antes del confinamiento por Covid-19, aunque se acordó posponer las obras hasta la finalización de la cría de la gaviota corsa.
Sin embargo, el acceso a la zona estos días ha permitido constatar la colonización de un grupo de gaviotas de una zona en obras activas en el muelle adosado, donde en 2020 se han instalado 157 parejas. Estas, sumadas a las 154 parejas más del dique suponen el total de 311. La elección de la zona nueva estaría relacionada con la afectación del temporal Gloria al dique Este y la paralización de la actividad por la crisis de la Covid-19.
Concretamente, el temporal Gloria terminó con casi la totalidad de la vegetación que había. Esto provocó que quedara un suelo muy compactado, con extensas capas sin vegetación que probablemente ha incidido en esta menor aceptación de la zona por las gaviotas nidificantes y la decisión de colonizar la zona cercana inmediatamente exterior y con una vegetación en buen estado donde esconder los nidos. La densidad de nidos en el núcleo del dique no es uniforme y los ejemplares se concentran allí donde hay vegetación, aunque sea muerta y seca.
Habrá que ver si la paralización de la actividad afecta a la cría en relación al tamaño de puesta y el éxito reproductor, ya que la gaviota, como otras especies, se aprovecha de los descartes pesqueros, y el descenso de la actividad pesquera de las últimas semanas la podría haber afectado. Precisamente, un equipo científico del CSIC evaluará estos efectos, dentro de su estudio periódico de la especie.
La gaviota corsa (o de Audouin) es una gaviota de tamaño medio, que se caracteriza en su forma por el pico que es de color rojo con el extremo negro, manchado de amarillo en su punta. En cuanto a su plumaje, es gris plateado y en las alas destacan las primarias negras, manchadas de blanco en sus extremos. Por último destacan sus patas que son oscuras.
