16-12-2019 / Ayer se celebró una jornada festiva para inaugurar la renovación de las instalaciones del Club de Lucha de Baró de Viver y la reforma de la calle Caracas, en el distrito de Sant Andreu. Ambas actuaciones forman parte del Plan de Barrios del Buen Pastor y Baró de Viver. Al acto asistió la concejala del distrito de Sant Andreu, Lucía Martín.
El distrito de Sant Andreu estrenó ayer un nuevo eje cívico que une los barrios de Bon Pastor y Baró de Viver, haciéndolo compatible con la fuerte actividad industrial que acoge esta zona del distrito de Sant Andreu. Se trata de la remodelación de la calle Caracas, que aporta mayor seguridad para los peatones y garantiza una mejora de la calidad urbana a lo largo de todo el vial. El proyecto se ha desarrollado siguiendo las aportaciones hechas por los vecinos y vecinas durante las sesiones de participación ciudadana celebradas en el año 2016.
Antes de la refoma, esta vía de 822 metros de longitud sólo se podía cruzar a través del paso de peatones de la confluencia con la calle Potosí. Actualmente, una vez pacificada la calle, se puede hacer a través de cuatro nuevos pasos de cebra con semáforo situados a la altura de las calles Cuzco, Maracaibo, de la escuela Monlau, y del centro de reciclaje existente.
Por otra parte, y aprovechando el ancho de la calle de 25 metros, se han habilitado nuevas zonas de estancia más anchas a lo largo de la calle, con nuevos bancos, papeleras y más iluminación. Las zonas de estancia incorporan nuevos parterres verdes para hacer la vía más amable para el vecindario.
De acuerdo con el carácter de área industrial, se ha mantenido el aparcamiento de vehículos en batería a ambos lados de la calle, mientras que las zonas de los pasos con semáforo se reservan a aparcamiento de motocicletas para facilitar la visibilidad en el paso de peatones .
Estas obras han supuesto una inversión de 3,5 millones de euros.
El emblemático Club de Lucha de Baró de Viver renueva sus instalaciones
Ayer también se inauguró la rehabilitación del Club de Lucha de Baró de viver para mejorar la práctica deportiva, adaptarse a las condiciones necesarias para la lucha grecorromana de alto nivel y abrirse a nuevas entidades de barrio. El club, que se fundó en 1962, es un referente de la vida comunitaria de Baró, con una población de poco más de 2.400 personas. La actuación forma parte del Plan de Barrios y se ha invertido 326.597,15 euros.
La reforma de la instalación del Club de Lucha de Baró de Viver han supuesto una mejora en el drenaje de todo el equipamiento, el aislamiento térmico y la impermeabilización, que usuarios y vecinos pedían desde hacía años. También se han racionalizado los espacios interiores del pabellón de manera que se facilite la correcta realización de la lucha grecorromana, de la que el Club de la Lucha es uno de los principales cunas de deportistas de alto nivel en Cataluña.
La reforma ha servido también para abrir el equipamiento al conjunto de vecinos y facilitar la utilización de los espacios deportivos por parte del resto del barrio, haciendo actividades para todas las edades y niveles de competición.
Las características de la instalación permitirán hacer actividades con acompañamiento musical y otras destinadas a objetivos más lúdicos.
Fundado en 1962, el Club de la Lucha es uno de los clubes pioneros de este deporte en Cataluña. En las instalaciones de Baró de Viver se practica la lucha libre y la lucha grecorromana, y sus luchadores y luchadoras han logrado varios campeonatos estatales para clubes y más de una quincena de títulos de campeón de España a título individual. Algunos de ellos formaron parte de la selección estatal que disputó los Juegos Olímpicos de Seúl (1988), Barcelona (1992) y Atlanta (1996).
Fotos: Ayuntamiento de Barcelona