28-9-2019 / La plaza del Movimiento Obrero, en el barrio de la Marina, se ha transformado en un parque de patinaje urbano de 3.000 metros cuadrados diseñado por el vecindario y el colectivo de patinadores, que lo han estrenado hoy con una matinal de deportes sobre ruedas (11-14 h) abierto a todos.
La transformación y acondicionamiento de la plaza del Movimiento Obrero para la práctica de deportes urbanos de deslizamiento es una reivindicación vecinal recogida por el Plan de Barrios. El proyecto se elaboró de forma colaborativa con el vecindario y el tejido asociativo del barrio de La Marina, en unas sesiones dinamizadas con expertos que comenzaron el último trimestre de 2017.
Allí se acordó crear tres espacios diferenciados: Por un lado, un área de uso intensivo de 2.000 metros cuadrados con la parte más activa del parque de patinaje; por otro, unas espirales convertidas en piscinas patinables o cuencos; y también una zona de iniciación, libre de obstáculos, situada en la parte inferior del espacio.
Una vez redactado el proyecto y licitadas las obras, la construcción del nuevo parque de patinaje comenzó el pasado mes de marzo y ha terminado este verano, con una inversión total de 924.000 euros.
Los principales objetivos de esta pista son ofrecer un espacio de calidad para la práctica de deportes urbanos a los niños y jóvenes del barrio; distribuir el espacio para que pueda ser utilizado para familias y usuarios de todas las edades; convertirse en un lugar de encuentro que conecte el barrio con la ciudad y facilitar espacios para diferentes usos públicos en el barrio de La Marina.
La plaza del Movimiento Obrero, convertida en parque de patinaje abierto, cuenta con una pérgola que garantiza la sombra durante el día y dispone de iluminación para las horas oscuras, vertebrando las zonas de práctica avanzada, de iniciación y de relax.
El parque estará siempre iluminado, con más o menos intensidad en función de la hora, facilitando un entorno más amable y, además, está rodeado por nuevas áreas ajardinadas. Los parterres se han hecho con piezas de hormigón que también hacen la función de bancos y límites de la zona verde.
Fotos: Ayuntamiento de Barcelona