Barcelona 15-2-2019 / El Ayuntamiento de Barcelona, a través del comisionado de Programas de Memoria, ha impulsado la creación del Espacio Memorial Parapeto de las ejecutadas y ejecutados 1939-1952 en el Camp de la Bota para recordar y homenajear a las 1.706 personas que murieron ejecutadas en Barcelona, la mayoría en este espacio del litoral barcelonés.
El Parapeto, que evoca el muro de ejecuciones que con los años ha quedado sumergido bajo el agua, es obra del artista Francesc Abad. Su instalación, en la plaza del Fórum, tiene lugar en cumplirse 80 años de la entrada de las tropas franquistas en la ciudad, en 1939, momento en que se inició la represión sistemática y las ejecuciones injustas por parte del franquismo. Con este proyecto Barcelona ha querido significar este espacio de memoria con los nombres de las ejecutadas y los ejecutados en la ciudad y homenajear su biografía.
Este proyecto habla de memoria y del olvido de las voces de los testigos, para dejar constancia de una realidad a menudo escondida y apartar la indiferencia. El trabajo artístico quiere contribuir a la recuperación de la memoria ciudadana sobre la implacable represión a la que fue sometida durante el franquismo. Se trata de una acción memorial que se enmarca en el programa municipal Aparta la Indiferencia, destinado a la evocación de la ocupación franquista de la ciudad, el 26 de enero de 1939, y sus consecuencias en cumplirse 80 años de aquellos hechos y el inicio de la represión.
Se da cumplimiento, asimismo, al acuerdo alcanzado en el Plenario del Consejo Municipal del Ayuntamiento de Barcelona. En la sesión del mes de enero diferentes grupos políticos acordaron conmemorar el octogésimo aniversario de la entrada de las tropas franquistas en Barcelona y del final de la Guerra de España de 1936-1939 con diversas iniciativas de carácter institucional, social y cultural para concienciar a la ciudadanía sobre la necesidad de defender constantemente la Libertad y la Democracia.
La inauguración del Memorial de las ejecutadas y los ejecutados 1939-1952 tendrá lugar el día 24 de febrero a las 12 horas en la plaza del Fórum. El acto contará con las actuaciones de Andrea Moti, Rusó Sala, Sabor de Gracia y Brodas Bros, que se sumarán a los parlamentos institucionales y en la ofrenda floral prevista.
Aparte del muro artístico con los nombres de todas las personas ejecutadas, el mismo día también se instalará en la plaza del Fórum un atril informativo que explicará los hechos.
En el contexto de la represión sistemática desatada por el franquismo, el 10 de febrero de 1939 se iniciaron los fusilamientos ante el parapeto del Campo de la Bota, un muro de hormigón similar a un rompeolas en el interior del mar, junto a la playa de arena. Desde el año 2004 el parapeto está cubierto por las aguas del puerto deportivo.
Las ejecuciones que tuvieron lugar en el Campo de la Bota fueron de mujeres y hombres que habían participado en los movimientos sindicales o sociales, en la organización cooperativa del trabajo, el deporte, la salud o la cultura, en la organización y mejora de la educación pública basada en la coeducación, la laicidad y el uso vehicular de la lengua catalana, personas que habían participado en la defensa armada de la República y la revolución, o que habían dirigido o gestionado los ayuntamientos o la administración republicana.
El 14 de marzo de 1952 se efectuaron las últimas ejecuciones en el Campo de la Bota; el Estado necesitaba mejorar su imagen internacional, y esta operación se inició con la celebración del Congreso Eucarístico de aquel 1952 y prosiguió con el reconocimiento del régimen franquista por la UNESCO a finales de año. Sin embargo, la represión por todos los medios, asesinatos y ejecuciones incluidos, se siguieron produciendo a lo largo de la dictadura, siendo la última ejecución el 27 de septiembre de 1975.
Con el Espacio Memorial Parapeto de las ejecutadas y ejecutados 1939-1952 del artista Francesc Abad ha optado por instalar en la plaza del Fórum un gran muro, de 55 metros de largo y 3,5 de altura, con los nombres de todas las personas que fueron fusiladas. Se trata, pues, de una estructura similar en forma y tamaño, el parapeto que fue escenario de las prácticas de tiro de los militares franquistas.
En el muro de la instalación habrá inscritos los nombres y apellidos de las 1.706 víctimas. Desde 1939 hasta el 1952, según la documentación extraída de los consejos de guerra sumarísimos, en una investigación efectuada por el Archivo Nacional de Cataluña.