Barcelona 21-1-2019 / La ronda de Sant Antoni vuelve a ser un espacio para el uso vecinal. El Ayuntamiento ha finalizado las actuaciones para liberar y adecuar el espacio que habían ocupado las carpas provisionales del Mercado de Sant Antoni y hacer posible la recuperación del espacio por los viandantes.
En noviembre pasado, el Ayuntamiento retiró las carpas que alojaron los comerciantes del mercado a lo largo de los 9 años que duraron las obras del edificio definitivo, inaugurado en mayo de 2018. La ronda, pues, quedó libre casi una década después, y durante la campaña de Navidad la ciudadanía ya ha podido pasear y acceder de manera más cómoda. Además, se ha contribuido a revitalizar el comercio del entorno, que ha tenido que convivir durante mucho tiempo con las dificultades que ha supuesto tener instaladas las carpas.
Una vez superada la campaña navideña, el Ayuntamiento ha llevado a cabo las intervenciones necesarias en el espacio para dotarlo de vida, actividades y usos ciudadanos y volver a poner a disposición del vecindario una calle que hace de conector entre los barrios de Sant Antoni y el Raval.
Así, se ha adecuado la losa que sostenía las carpas provisionales, de 4.519 m2. Y encima se ha hecho una intervención artística elaborada por Rebobinart y el artista Ampparito que integra juegos infantiles y lúdicos pintados en el suelo, y que quiere dar valor al espacio público ya la vez fomentar el arte urbano de calidad.
También se ha instalado nuevo mobiliario urbano, con 7 bancos, 10 sillas y 48 árboles nuevos, y se ha renovado el alumbrado. En total, se ha invertido unos 350.000 euros en la recuperación de la ronda de Sant Antoni.
La reforma definitiva de la ronda, a partir de 2020
Paralelamente, el Gobierno municipal también trabaja en el proyecto de transformación definitiva de la ronda de Sant Antoni en un nuevo eje con más cívico y verde donde los peatones, las bicicletas y el transporte público ganen protagonismo. Esta reurbanización permitiría dar un paso más en la lógica de que la ciudad vaya sumando más espacio destinado a los vecinos y vecinas y reducir el peso del coche y el transporte rodado.
El equipo de Gobierno plantea la reurbanización completa de la ronda, entre la calle del Conde de Urgell y la plaza de la Universitat. Siempre bajo los criterios de mejorar el espacio público, introducir un carril bicicleta, más verde y poner los peatones y la movilidad sostenible en el centro de las prioridades.
El Gobierno municipal abrirá un debate para decidir de manera consensuada con todos como debe dialogar la futura ronda de Sant Antoni con el contexto actual. La previsión, pues, es recoger las demandas y reivindicaciones en cuanto a aspectos como las nuevas necesidades de movilidad para trabajarlas y terminar los proyectos ejecutivos con la voluntad de empezar las obras de la reforma definitiva a partir de 2020.
Fotos: Ayuntamiento de Barcelona