Barcelona 20-1-2019 / El concejal del distrito de Gràcia, Eloi Badia, ha anunciado que el ayuntamiento podrá retirar de forma retroactiva la licencia de obras de construcción en la propiedad de las casas situadas en la calle Encarnació número 15-17, en el barrio de Gracia.
La operación será posible en virtud de dos preceptos legales. Uno es la Ley de Espacios Naturales de la Generalitat y el otro es la ordenanza municipal de Medio Ambiente, que permiten retirar un permiso de obras que afecte a un elemento natural protegido.
Dentro de la finca en cuestión, donde la propiedad se disponía a derruir las casas para posteriormente ejecutar una promoción de viviendas, se encuentra una encina bicentenaria. Los servicios de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Barcelona ya han iniciado el expediente que permitirá catalogarla. Con el inicio de este expediente de catalogación ya se dictaron medidas cautelares, para detener las obras de derribo de las dos edificaciones de la finca.
Badia ha explicado que junto con los vecinos y vecinas, organizados bajo la plataforma ‘Salvemos l’Alzina’, se vio la posibilidad de recurrir a esta base legal para retirar la licencia de obras. Son, en concreto, los artículos 9 y 10 de la Ley de Espacios Naturales de la Generalitat, que prohíbe la destrucción de «las especies de la flora que necesitan una preservación especial».
Por su parte, la ordenanza municipal de medio ambiente (artículo 74.10.4), establece que «cualquier proyecto previsto en una zona cercana a un árbol, incluido en el Catálogo de árboles de interés local, ya sean públicos o privados, deberá de garantizar su perfecta conservación y condiciones de desarrollo».
En virtud de estos dos preceptos, una vez aprobada la catalogación de la encina en el consejo plenario del mes de enero, el consistorio podrá dictaminar definitivamente la retirada de la licencia de obras, ahora suspendida de forma cautelar.
Paralelamente, el distrito ha propuesto iniciar un proceso para la revisión del catálogo de patrimonio de Gràcia, para proteger elementos de interés patrimonial que hasta ahora no tienen ninguna protección, como por ejemplo las fincas de Encarnació. Badia recordó que «la catalogación hecha en 2015 en el anterior mandato ha resultado claramente insuficiente. Ahora toca hacer una más sólida y que mejore la del 2.000». El concejal ha explicado que esta revisión abriría la posibilidad de proteger los elementos singulares de las viviendas de la calle Encarnació, o al menos, su fachada.
Fotos: Twitter Salvem l’Alzina / @l_salvem