Barcelona 24-10-2018 / La Guardia Urbana de Barcelona ha iniciado una prueba piloto que, bajo el lema Mayores: queremos tu seguridad, busca evitar la accidentalidad entre los mayores de 65 años informándoles, formándolos y modificando conductas para mejorar su propia seguridad y la de los demás usuarios.
El proyecto, trabajado conjuntamente y en coordinación entre Guardia Urbana, la Dirección de Servicios a la Infancia, Juventud y Tercera Edad del Ayuntamiento, y TMB, se inicia ahora en los barrios de la Sagrada Familia y Besòs. Este proyecto define el alma de proximidad del cuerpo policial barcelonés y está previsto que se extienda a toda la ciudad durante el 2019.
Esta formación se llevará a cabo en una sola sesión de tres actividades. En la primera, los agentes de la Guardia Urbana recorrerán con las personas participantes -que normalmente estarán vinculadas a algún hogar de gente mayor-, el entorno del barrio, para recordarles hábitos de seguridad en la movilidad como peatones. Durante el recorrido, se les advierte de los peligros que se pueden encontrar en el espacio público.
También, se les recomienda donde detenerse para esperar el cambio de semáforo en un paso de peatones -se les recuerda que nunca debe ser el rebaje de la acera-, y cómo y cuándo cruzar la calle con la máxima seguridad.
En la segunda actividad, los participantes subirán a un autobús de TMB, y personal técnico de TMB les explicarán los consejos de seguridad que deben seguir desde la perspectiva de un pasajero para evitar caídas en el interior del vehículo y como acceder y bajar del autobús con seguridad.
Finalmente, en la última actividad, los asistentes realizarán una sesión teórica, en el hogar de ancianos de cada barrio, donde se recordarán los consejos de seguridad ya expuestos durante el paseo. Al mismo tiempo, se promoverá el debate sobre temas de interés de los asistentes.
Un colectivo vulnerable
El proyecto pone el foco en un colectivo especialmente vulnerable a la ciudad en relación con la accidentalidad con peatones implicados, ya que cerca del 35% de los atropellos que hay en la ciudad tiene como protagonistas personas mayores de 65 años. La cifra también es alta entre las víctimas mortales por atropello.
Otro dato relevante en relación con la accidentalidad con la gente mayor como principal colectivo afectado es la alta accidentalidad en el interior de vehículos, como los buses o el metro. Alrededor del 70% de caídas dentro de un vehículo de transporte público son de personas mayores.
El año 2017 hubo 5 víctimas mortales por atropello, tres de las cuales superaban los 72 años. Este año, dos de las víctimas mortales por atropello también los superaban.
Según una encuesta realizada para llevar a cabo el plan piloto, la movilidad de las personas mayores se reduce prácticamente en su barrio -entre servicios y comercios-. También utilizan mayoritariamente el autobús y luego el metro y el tranvía. Además, perciben el crecimiento de los vehículos de movilidad personal como un elemento de riesgo y consideran que no se respeta suficientemente los pasos de peatones.
En Barcelona, más de 300.000 personas de 65 años o más viven solas, de las que 100.000 superan los 80 años.
Foto: Guardia Urbana